Cuando se trata de dietas, no siempre es fácil, todos lo sabemos. Entre lo que te quitan, lo que te dan, el cambio de hábitos y los horarios, a veces parece demasiado trabajo para el poco tiempo que tenemos de preparación. Sin embargo, los resultados de este estudio podrían revelar el gran consejo a seguir, para bajar de peso de forma efectiva.
Hagas lo que hagas, agrega esto a tu dieta y verás la enorme diferencia
¿El secreto? La fibra. Sí, así es. Podría sonar predecible, creo que a todos nos lo han dicho alguna vez, pero agregar una buena cantidad de fibra a tu dieta (unos 30 gramos al día) marcará la diferencia.
Recientemente se llevó a cabo un estudio con pacientes que sufrían de síndrome metabólico y obesidad. A unos se les dio la dieta estricta de la Asociación Americana del Corazón: un documento de 12 puntos y se les pidió seguirlo al pie de la letra. Al otro grupo sólo se les pidió comer más fibra, así de simple. Ninguno de los dos grupos tenía que hacer ejercicio.
Al año, se midieron los resultados y el grupo con la dieta compleja bajó aproximadamente 3 kilos, mientras que el grupo de fibra bajó poco más de 2.5 kilos. Si bien la dieta mostró tener una “mayor” tasa de reducción, también descubrimos que la fibra por sí misma hace un trabajo extraordinario.
¿Entonces qué debo hacer yo? ¡Sencillo! Agrega fibra a tu dieta, no demasiada, y eso hará que te sientas más satisfecho y tu cuerpo procese mejor los alimentos. Si usas este secreto como forma de potenciar tu alimentación sana y tu rutina de ejercicio, ¡imagínate las maravillas que puedes lograr!
Estas son las fuentes más comunes (y deliciosas) de las cuales puedes obtener la fibra:
- Manzanas
- Espinacas
- Peras
- Ciruelas
- Frutos secos
- Arroz integral
- Palomitas naturales
- Pan integral
- Brócoli
- Zanahorias
